Por Ramón Ruestes Faire
El naranja es el camino del éxito
Orange Is The New Black tenía una dura rival en su segunda temporada, competir contra sí misma. La primera temporada fue para mí la serie revelación del año 2013, junto con The Blacklist, aunque son series completamente distintas.
La señal de identidad de la serie es difuminar el protagonismo de sus personajes, haciendo a los secundarios principales o viceversa, dando una importancia vital a su conjunto. El uso de los flashbacks para profundizar en los personajes y a la vez para contar historias secundarias y dar aire a la trama principal es realmente fantástico. Otra característica que se mantiene es la incorporación de elementos o situaciones con una alta carga dramática, sin olvidar el humor fresco que desprende la serie. Es increíble cómo una comedia puede introducir situaciones tan dramáticas con tanta maestría.
En dicha temporada se acierta dando menos peso a Piper Chapman. Interpretada por Taylor Schilling, en esta ocasión se cierra la trama de su adaptación, la cual ha sido el eje central de su vida desde el inicio de la serie, y se centra en su triángulo amoroso con Larry Bloom y Alex Vause, los cuales confío en que pierdan más peso aún, y la sensación de soledad que da la cárcel.
El protagonismo que pierde Piper Chapman se lo reparten una fantástica Red, interpretada por Kate Mulgrew y su Moriarty Vee, interpretada por Lorraine Toussaint. La incorporación de Vee ha dado mayor agresividad a la trama. Personaje manipulador y mafioso, integrará en la cárcel el concepto de lucha de clanes, arrastrando hacia la primera línea de acción a gran parte de los teóricos secundarios. Gracias a ello, veremos un mayor desarrollo personal de Taystee y Poussey Washington, así como los altibajos de su relación.
El personaje de Red es el que más evoluciona, aunque no siempre con éxito. Su rivalidad con Vee es su mayor baza y a la vez su punto débil. En muchas situaciones, el papel de su antagonista se sobrepone al suyo. Realmente, cuando aparece Vee se come la pantalla.
De la manipulación de esta última sale el personaje de la temporada, ni más ni menos que el de Suzanne Warren u Ojos Locos, interpretado de forma magistral por Uzo Abuda. El talento de dicha actriz interpretando a un personaje tan volátil es simplemente majestuoso. Presentada ya en la primera temporada, es en esta segunda cuando se muestran sus matices, su personalidad. Sus actos, sus frases o sus locuras son un verdadero hallazgo.
La carga dramática vuelve a estar presente de la mano de una enigmática Rosa Cisnero. Interpretada por Barbara Rosenblat, su personaje será el encargado de dar el toque más sobrecogedor.
Por último comentar los personajes de Morello y Nicky, interpretadas por Yael Stone y Natasha Lyonne. Por su nobleza y bondad, son dos de los personajes más queridos. En el caso de Morello, en esta temporada se completará en todo o en parte su historia amor. Nicky, el perfecto complemento de cualquier trama, se verá tentada por su pasado, dando indicios de como su historia puede marcar la tercera temporada.
En resumen, Orange Is The New Black en la segunda temporada sabe mantener su estilo y potenciar sus virtudes, consolidando las bases de la serie y su papel como una de las grandes de la pequeña pantalla.
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