*Artículo originalmente publicado en octubre de 2012.
El sancta santórum del Real Madrid C.F., el Estadio Santiago Bernabéu, tiene la firme intención de reinventarse. Los proyectos seleccionados en el concurso internacional de ideas que el equipo madrileño lanzó no tienen sólo la voluntad de lavar la cara del estadio. El Real Madrid quiere dualizar de alguna manera el carácter del estadio, haciendo que no sólo sea un lugar en que se celebran partidos de fútbol y algún que otro evento esporádico, sino que se integre en la ciudad de Madrid a modo de hito arquitectónico. Quieren que su imagen sea reconocible a nivel internacional y se convierta en uno de los sellos de identidad de la capital. A parte, la entidad deportiva quiere hacer del Santiago Bernabéu una referencia como instalación deportiva para el resto del mundo. Para ello, ha elegido a los mejores, que han dado cuatro proyectos finalistas.
Estos cuatro proyectos están firmados con los mejores nombres del panorama arquitectónico nacional e internacional. Desde casa vienen tres de los más grandes. Por un lado, el equipo de arquitectos de Lamela, un estudio de arquitectura con sede en la capital, pero con trabajos en todas partes del mundo y de muy diferentes tipologías, desde conjuntos residenciales o polideportivos en Varsovia (imagen superior) o Malabo (Guinea Ecuatorial) a sedes de bancos en China o terminales de aeropuerto como el de Barajas. Por el otro lado, el arquitecto cordobés Rafael de la Hoz. No tiene experiencia en el diseño de áreas deportivas de este tipo, y su actividad la desarrolla principalmente en España, pero eso no menoscaba su capacidad de proyección en multitud de tipologías dispares, desde hoteles, a centros y sedes empresariales, o concesionarios y puertos. Su proyecto más reconocible es el Distrito C de Telefónica (imagen central), un enorme complejo empresarial situado en Las Tablas, a las afueras de Madrid. Por último, un maestro de la arquitectura, probablemente el mayor arquitecto que ha dado el panorama nacional, Rafael Moneo, quien por cierto, ha recibido en la convocatoria del presente año el Premio Príncipe de Asturias de las Bellas Artes. Sus trabajos están repartidos a lo largo y ancho del planeta, desde la catedral de Los Ángeles en California al Zoco de Beirut en Líbano, sin contar la enorme producción que ha tenido en nuestro país, entre lo que destaca el Kursaal de Donostia (imagen inferior). Estos tres arquitectos se han unido para llevar a cabo el proyecto del Santiago Bernabéu a otros tres grandes del panorama internacional.
El estudio Lamela se ha unido en esta ocasión al grupo Populous, uno de los mayores referentes mundiales en cuanto a arquitectura deportiva. Son los encargados por ejemplo del diseño del Estadio Olímpico de Londres, la remodelación del circuito de Silverstone o el Soccer City de Johannesburgo. De la Hoz se ha aliado con uno de los nombres más reconocibles de la arquitectura a nivel mundial, Norman Foster, uno de los arquitectos más premiados y reconocidos del panorama actual. Sus obras en el ámbito deportivo se reducen al Estadio de Wembley en Londres y, paradójicamente, a la casa del eterno rival del Real Madrid, el Estadio Nou Camp del F.C. Barcelona. Rafael Moneo ha decidido colaborar con el estudio suizo Herzog & De Meuron. Este prestigioso grupo es uno de los más versátiles y flexibles del mundo de la arquitectura. Ejecutan brillantemente proyectos residenciales, urbanísticos o culturales, como museos, centros de danza o teatros. Su producción es interminable y muy variada, y en el ámbito deportivo no se quedan atrás. Son los responsables del diseño de estadios como el Allianz Arena en Múnich o el Estadio Nacional de Pekín, sede de sus Juegos Olímpicos. Para plantar cara a estos seis mayúsculos arquitectos, se presentan los estudios GMP Architekten (Alemania), L35 (estudio internacional con sede en Madrid, París, Barcelona y Casablanca) y Ribas (Barcelona), que son bastante más desconocidos que el resto de arquitectos, pero que sorprendentemente son los mejor posicionados entre los proyectos presentados. Su propuesta es la que más gusta al club a día de hoy.
A – Estadio Olímpico de Londres (Populous); B – City Hall de Londres (Foster); C – Estadio Olímpico de Pekín (Herzog & de Meuron); D – Baku Crystal Hall (GMP); E – Centro Comercial Islazul (L35); F – Sede de Radio Televisión Española (Ribas)
La directiva del Real Madrid pide tres premisas a cumplir para los proyectos que se han presentado. La primera es que se cubra el estadio (siendo la única propuesta que lo cubre completamente la de GMP + L35 + RIBAS). Con esto se pretende aumentar la confortabilidad de los forofos, y si es posible, el aumento del aforo del estadio. Por otro lado, otro requisito es la creación de dos grandes puntos de reunión, dos plazas situadas, una, en la fachada del Paseo de la Castellana y otro, en la ubicación actual del centro comercial La Esquina del Bernabéu, en la calle Concha Espina. La tercera petición es que, en la fachada principal del estadio, la del Paseo de la Castellana, que es donde la edificación tiene posibilidades de crecer, se creen los espacios institucionales necesarios, así como los espacios dedicados a servicios asociados al club, como restaurantes o tiendas oficiales.
En menos de un mes se sabrá cuál es la imagen definitiva que tendrá el nuevo Santiago Bernabéu. La directiva del club merengue tiene la misión durante este tiempo, con la ayuda de una consultora externa, de elegir entre estos cuatro proyectos finalistas cuál es el definitivo, y qué modificaciones deben hacerse si fuese necesario en ellos. Para que se decanten por uno o por otro, el club ve decisivo que sea viable económicamente. Y aunque parezca una premisa más que evidente, el club no puede permitirse que sea de otra manera, ni siquiera tratándose del primer club del mundo en superar los 500 millones en ingresos. La directiva ha determinado que los 250 millones de euros de precio estimado para la construcción de estos proyectos, deben ser amortizados en cinco años. Y para ello están pensados los espacios comerciales situados en la fachada de la Castellana, que estarán dedicados, a parte de los mencionados anteriormente, a un hotel de lujo y aparcamientos por ejemplo.
Hasta que la cúpula del club se reúna con la consultora y se decida en firme cuál de los cuatro proyectos se convertirá en el nuevo templo madridista, se ha dejado entrever una cierta predilección por la propuesta de GMP + L35 + RIBAS. El asunto se está llevando con absoluto hermetismo, pero miembros de la directiva han dejado ver en publico su predilección por este proyecto, aunque por lo general también gusta bastante el de Rafael de la Hoz + Norman Foster. El grupo GMP Architekten no son nuevos en esto de la arquitectura al servicio del fútbol, son autores, entre otras muchas cosas, de los estadios de Moses Mabhida (Durban) y el estadio Nelson Mandela Bay (Port Elizabeth), ambos sede del pasado Mundial de fútbol, o del Estadio Olímpico de Kiev, sede de la última Eurocopa.
PROYECTO DE RAFAEL DE LA HOZ + NORMAN FOSTER
PROYECTO DE GMP ARCHITEKTER + L35 + RIBAS
PROYECTO DE RAFAEL MONEO + HERZOG & DE MEURON
PROYECTO DE LAMELA + POPULOUS
Después de realizarse la asignación del proyecto habrá un período de siete meses para realizar cambios o ajustes en el proyecto ganador, y las obras se realizarán a lo largo de los tres siguientes veranos, período en que el club ha estimado que será menos perjudicial para sus socios y seguidores
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